En esta primera campaña de
excavación en Lantarón se ha planteado una intervención pequeña en cuanto a su
extensión se refiera, con el doble objetivo de intentar comprender los restos
identificados mediante la prospección geofísica y comprobar el estado de
conservación de las estructuras arqueológicas detectadas. La zona donde se
centrará la excavación arqueológica será la situada inmediatamente al norte de
la ermita de San Martín, donde se prevé realizar tres sondeos, aunque este
planteamiento puede variar según los resultados obtenidos en campo durante la
propia excavación.
Sondeos planteados para la campaña 2012
La elección de esta zona
como lugar de excavación responde a dos razones principales. En primer lugar,
es el lugar menos afectado por las remociones de tierra como consecuencia de la
construcción de los barracones para los obreros que trabajaron en la presa de
Sobrón en los años cincuenta y sesenta. Estos barracones se situarían
inmediatamente al este de la ermita, ocupando parte de la zona amesetada de la
colina donde se asienta ésta.
Foto aérea del vuelo americano de 1957 en el que se aprecian los barracones de los obreros
En segundo lugar, las
prospecciones geofísicas* realizadas en el año 2011 dentro de la primera fase
del proyecto de intervención han revelado la presencia de algunas estructuras
en esta zona en forma de muros de piedra, posibles enterramientos e incluso una
posible fase anterior de la ermita.
Interpretación de la prospección geofísica llevada a cabo en el entorno de la ermita (JUAN ANTONIO QUIRÓS CASTILLO, "Informe del proyecto arqueológico de Lantarón, 2011")
De esta manera, consideramos
que esta zona es la más propicia para la realización de una intervención
arqueológica que pueda dar respuesta a los planteamientos antes esgrimidos, y donde
esperamos obtener los suficientes resultados arqueológicos para comenzar la
interpretación arqueológica e histórica de este territorio.
No obstante, no descartamos
la posible intervención – de modo muy puntual - en un pequeño espacio
aterrazado en la colina oeste, sobre el cortado del río, ya que en la
prospección realizada el pasado año se localizaron una serie de materiales muy
significativos.
* Una prospección geofísica
o georadar es una técnica no destructiva que permite identificar estructuras
bajo el suelo. Consiste en lanzar ondas electromagnéticas que rebotan en el
momento en que detectan variaciones significativas en la composición del terreno.
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